La silimarina es un fitoactivo clasificado como hepatoregenerador, hepatoprotector y hepatodrenador, las tres funciones se enfocan en protección hepática, prevención de enfermedades degenerativas de hígado, prevención de hígado graso y la formación de barro biliar. La toxicidad orgánica tienen como órgano eje el hígado, la fitoterapia tiene en el cardomariano el activo más eficaz en detoxicación hepática.
En la fórmula estandarizada del CARDOMARIANO se aisla un fitoactivo llamado SILIMARINA que se encuentra en una concentración por cápsula de 80% del activo, la investigación medicinal de la silimarina está indicada para infecciones crónicas de hígado y de vesícula biliar, en caso de intoxicación por ingerir sustancias nocivas y envenenamiento hepático, indigestión por consumo de alimentos grasos y/o bebidas alcohólicas, regula los niveles de glicemia en sangre, impide el daño hepático y renal provocado por ciertos medicamentos antivirales, alalgésicos, antibióticos y antiinflamatorios, impide la peroxidación lipídica (acción antioxidante en tejidos grasos), induce la poptosis en células cancerosas, reduce los niveles de colesterol, reduce la insulinoresistencia en pacientes con diabetes tipo 2 que también padecen cirrosis, reduce los efectos de la resaca y aumenta la producción de leche en mujeres tras el parto.